Este muchacho no para de sorprenderme. En plena sequía es capaz de encontrar un charco... y, claro está, meterse dentro. Luis Mi se dedica ahora a demostrar lo bien que coloca las pegatinas en los taxis ayudado por su compañera en la lista electoral del PAR, Elena Allué. Si cuando menos se hubiera estado calladito pues estas líneas no se habrían escrito. Pero no. Él ve un micro y ¡hala! a meter la pata. Y luego resulta que Paco, "el chota", "el chivato", "el traidor" no para de desprestigiar al gremio. Pero si para esa faena no me dejas espacio, te bastas tú solito.
Ya queda menos, colega. Así que átate los machos porque pronto hablaremos de tú a tú y con testigos.
Sirva como anticipo de lo que será la respuesta a LusiMi y su APATZ y a todos aquellos que defiendan sus mismas posiciones desde la mentira y la manipulación.
Comprensible resulta que los particulares persigan desde el egoísmo y la falacia sus propios intereses pero que desde las instituciones se apoyen, por puro corporativismo partidista, los despropósitos de un personajillo como Luis Miguel de Torres, resulta vulgar, ofensivo, discriminatorio y dañino.
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http://www.aragondigital.es/asp/carta.asp?notid=35585
Comprensible resulta que los particulares persigan desde el egoísmo y la falacia sus propios intereses pero que desde las instituciones se apoyen, por puro corporativismo partidista, los despropósitos de un personajillo como Luis Miguel de Torres, resulta vulgar, ofensivo, discriminatorio y dañino.
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