jueves, 5 de agosto de 2010

Gracias, LuisMi.


En boca cerrada no entran moscas. (*)
De partida, confieso que LuisMi me aburre. Durante el tiempo en que peleamos por la concesión de nuevas licencias me pareció útil y casi imprescindible señalar cada una de sus meteduras de pata. Eso me llevó a escribir más de 100 artículos en este blog. Su incoherencia e inconsistencia intelectual me lo pusieron fácil. Buena prueba de ello es que nuestros objetivos se vieron, en buena medida, más que cumplidos. Ahora solo nos falta ponerle la guinda al pastel. Ésa que tanto miedo le produce a LuisMi ver con sus ojos. Ésa que le lleva a ocuparse cada día más en que no se haga realidad y eso que cuando firmó el acuerdo con el Ayuntamiento se las prometía muy felices vendiendo a la minoría fanática que le sostiene que todo estaba atado y bien atado. Parece que le ha llegado alguna onda de por dónde irá la sentencia sobre el nuevo Reglamento junto con el canon que contempla y no sabe como construirse un disfraz que le esconda de su fracaso más vergonzante: Su traición a toda una Asamblea para conseguir nada de nada si exceptuamos el aplauso de los que ahora somos titulares de una licencia.

Repito, LuisMi me aburre. Desde la perspectiva sindical me ha parecido el mejor aliado que pudimos tener. En ese sentido no ha cambiado mi opinión sobre él. Estoy convencido de que otro presidente en la APATZ, con un mínimo de luces y el respaldo que él tuvo, nos lo hubiera puesto más que difícil para conseguir la mitad de lo que conseguimos.

Pese al aburrimiento que me provoca me hago eco de las peticiones de algunos compañeros para que comente ciertos detalles del último número de la revista Zarataxi (N.º 42, junio 2010) en especial su editorial y el artículo que se refiere al encuentro con la candidata Rudi. A ello voy.

Respecto del editorial

Es difícil de entender cómo el presidente de la APATZ, sin el más mínimo pudor, usa el dinero de los socios para manipular la realidad; para tratar de encubrir el fiasco que, en lo sustancial, ha supuesto su gestión. Si para ello tiene que culpar a otros, no le duelen prendas. Es su técnica habitual.

Cito del editorial: “lo más relevante está en la preocupación de muchos asociados debido a la actitud egoísta de algunos compañeros que llevan el coche duplicado sin estar enfermos, ni tener 55 años. (...) Esto se pensó para socios que tuvieran enfermedad grave o achaques por la edad, que no permitieran una jornada laboral normal y que, para asegurar su sustento, pudieran contratar a alguien para dar uso a su licencia (..)Fuera de ello, estamos ante actitudes insolidarias y de anticompañerismo”

Y el desahogado se queda tan pancho. Supongo que creerá que a los taxistas de Zaragoza les flaquea la memoria en la misma medida que a él la vergüenza. Supongo que LuisMi pensará que ya nadie se acuerda de que el antiguo Reglamento impedía la contratación de asalariados excepto para los casos de excedencia o de baja médica. Supongo que LuisMi tendrá la esperanza de que todos han olvidado que fue él quien firmó la muerte del antiguo Reglamento y que lo hizo traicionando la voluntad soberana de toda una Asamblea gremial. Supongo que LuisMi quiere ocultar que gracias a esa traición y a esa firma del acuerdo hoy tenemos 53 coches doblados.

Leo más adelante: “Por fin, hemos convocado a los sindicatos para elaborar un convenio provincial del taxi (...) Iremos en camino de dignificar la figura del asalariado”

Menuda desvergüenza. Todavía recuerdo cómo se apuntaba el tanto de la firma del vigente Convenio Nacional del Taxi olvidando que UGT era uno de los firmantes. ¿Qué ocurre ahora? ¿Ya no es bueno el convenio? ¿Quiere cambiarlo porque se da cuenta del gol que le metieron? Que no cuente con UGT para llevar a cabo sus planes. A LuisMi le preocupa la dignidad de los asalariados lo mismo que a mí su futuro personal o profesional: Una higa. Para LuisMi el asalariado es alguien a quien reducirle derechos y a quien ocasionarle gastos como el canon. Y ahora se las da de defensor de su dignidad. Sobre ese particular algo tendré que decir en la supuesta mesa de negociación para el convenio provincial porque ese convenio está muerto sin la firma del único sindicato que en Aragón tiene un nivel de afiliación suficiente para constituir una sección sindical del taxi. Una sección de la que yo soy responsable.

Respecto del encuentro con Luisa F.Rudi
Cito: “La Asociación preguntó a la candidata que si se llevaría a efecto el lema que el mismo PP impuso en la ordenanza del Taxi de 1999, ‘un coche un conductor’.”

Supongo que la Asociación le aclararía a Rudi que fue su presidente, Luis M. de Torres Segura, el que firmó la defunción de la Ordenanza de 1999 y con ello el principio de “un taxi-un conductor”. El mismo que ahora pide su reestablecimiento. Espero que la candidata tenga conocimiento de la absoluta falta de coherencia del que fuera candidato por el PAR al Ayuntamiento de Zaragoza.
Más adelante se puede leer:
“Se le expuso a Rudi el hipotético caso de que los jueces determinaran aceptar la impugnación del Reglamento del año 2007 (los jueces ya aceptaron la impugnación, botarate, otra cosa es el fallo de la sentencia), especialmente en lo referente al canon económico, y se le preguntó sobre la postura que podría tener un Ayuntamiento del PP; Rudi afirma que un mandato judicial está para ser cumplido, se devolvería el dinero en litigio y se retirarían también las licencias adjudicadas por no estar conformes a derecho.”

Ahí lo tienen. Pura contradicción. El encargado de velar por los intereses de los taxistas empeñado en que haya taxistas que sufran el peor de los perjuicios: La retirada de sus licencias. Ese es Luis Miguel de Torres Segura, más conocido por LuisMi I de la APATZ, el Traidor de Asambleas.

Supongamos que se da lo que LuisMi teme que se dé. Un fallo que considere contrario a derecho el actual reglamento y el canon (?) que contempla. Pues bien ya le anticipo a LuisMi, el defensor del asalariado, que devolverán el dinero pero que no se retirarán las licencias porque estas vinieron acompañadas de un estudio que avalaba la procedencia de su otorgamiento. La decisión de ampliar el número de licencias no fue contraria a derecho.
Con todo mi aburrimiento, gracias por tu ayuda. En su momento fue imprescindible para conseguir nuestros objetivos. Y lo mejor es que tú nos ayudaste buscando todo lo contrario.

Las licencias fueron concedidas de acuerdo a la legalidad todavía vigente excepto en lo que se refiere a la antigüedad, a los autónomos colaboradores y a la aplicación del canon. Esa es la guinda que verás dentro de poco en el pastel que, a pesar de no probar, te producirá una indigestión tan grande como tu incompetencia.


* La foto que ilustra este artículo procede de la edición digital de la revista Zarataxi (http://www.zarataxi.com/revistas/Zarataxi42.pdf) y será retirada en cuanto sus responsables manifiesten de forma fidedigna su disconformidad con la utilización que de ella se hace en este blog.