domingo, 16 de octubre de 2011

sábado, 1 de octubre de 2011

Gayán, el espacio, el tiempo y la relatividad

¡Qué cosas tiene la vida! Nunca llegué  pensar que un simple taxista pudiera disponer de tantos poderes y capacidad de trabajo como el presidente de la Cooperativa de Taxis (en adelante, CT), Jesús Gayán Carceller.
Veamos. Como es sabido, Gayán recibe una compensación económica por su dedicación a la presidencia de la CT. Para ello, Gayán dispone de despacho en la planta noble de Gómez Laguna 155; claro que sus funciones le exigen a veces el doloroso esfuerzo de abandonar tan humilde lugar de trabajo para hacer gestiones relacionadas con la CT y solo con la CT. El caso es cumplir estrictamente con el horario de trabajo por el que el colectivo del taxi zaragozano le abona unos 3.500 euros mensuales.
Gayán es un tipo listo. Muy listo, diría yo. Tanto que lo han elegido alcalde de Villanueva de Gállego. Y lo han elegido porque sus poderes le permiten, por ejemplo, visitar como alcalde  las instalaciones de la Universidad San Jorge  dentro del horario de dedicación a la CT. 
No puedo negarlo, le admiro. Pocos como él son capaces de poner en practica las teorías de Einsten. Eso de que el tiempo es relativo no tiene secreto alguno para Gayán. Por la mañana en la CT y de 13'30 a 15'00 a ejercer la alcaldía en el Ayuntamiento villanovense. Según fuentes del cosistorio de Villanueva, acude en ese horario para firmar documentos porque no puede restar tiempo de sus obligaciones como presidente de la Cooperativa que es lo que le da de comer. Por esa razón le viene tan bien relativizar el tiempo y hacer uso del don de la ubicuidad.
Solo alguien con esos poderes pude estar en dos frentes al mismo tiempo y cumplir a la perfección con cometidos diferentes. Lo mismo visita la Universidad San Jorge mientras gestiona la Cooperativa que estudia asuntos municipales (que luego firmará de  13'30 a 15'00) mientras  recibe visitas de proveedores. Y lo hace todo a pedir de boca.
Los 545 euros que cobra del Ayuntamiento de Villanueva me parecen una injusticia para uno de los pocos políticos que acceden a una alcaldía de manera altruista, sin ambiciones crematísticas, sin ningún tipo de interés bastardo. Nadie puede pensar mal de él  por mucho que uno de los partidos que le sustentan en el sillón municipal (CDL) cuente en sus filas con el hermano de la ex-alcaldesa con más imputaciones penales de España por sus gestión en La Muela.
Los 545 euros son una mierda para Gayán. Gayán es un alcalde altruista. Por eso, cuando va a la firma municipal ya lleva los asuntos estudiados. ¿Cómo? Ni lo imagino porque la honradez y el altruismo de Gayán me impiden pensar que, durante el horario por el que cobra de la CT, estudie asuntos municipales. ¿Cómo pensar que en el despacho de la Cooperativa haya un solo papel ni un solo minuto para pensar en la alcaldía de Villanueva de Gállego? La honradez de quien incumple sentencias me impide suponer que en el despacho de la Cooperativa se estudie un solo asunto del ayuntamiento que Gayán preside.
Taxistas de Zaragoza, no tengamos ni un mal pensamiento porque la prensa diga que Gayán ha asistido a un acto como alcalde en el horario en que debería gestionar asuntos del taxi. No pequemos de ignorancia y mala fe; Einstein ya demostró que la velocidad de la luz, ese valor absoluto que todo lo relativiza, permite hacer más cosas de las que nosotros, taxistas perezosos, pudiéramos soñar y Gayán ha demostrado sobradamente en este gremio su amor al trabajo de taxista.
Agradezcamos al destino que haya puesto a nuestro servicio a tan honrado presidente sobre el que no debe caer ni una sombra de duda.
¡Señor, Señor! ¡Cómo brillan las sombras!