viernes, 11 de abril de 2008

LuisMi sabía que firmaba en contra del gremio

... Y lo dice tan campante. Lo dice en un hilo de zarataxi titulado ¿Dónde se alquila uno?
Después de emplear 3/4 partes de su escrito en echarse flores por el trabajo que ha hecho nos cuenta de nuevo cómo fueron las negociaciones para firmar el acuerdo... Desde su óptica claro. Lo que no dice es cómo fueron en realidad y cómo se tragó el anzuelo que le echaron desde su propio partido.
No me sorprende porque sé muy bien cómo fueron las cosas y si a mí se me calzan como se lo calzaron a él, necesitaría mucho bosque para esconderme. No pasará mucho tiempo para que la mayoría del colectivo sepa, en realidad, cómo y por qué finalizaron las negociaciones.
Lo más llamativo de todo el intento exculpatorio de LuisMi, esta vez bajo el pseudónimo de Asociación, es el siguiente párrafo:

"(...)Al final llegamos a una propuesta de 500 pero solo con 50 licencias, el resto con 170 más de coches doblados hasta completar y eso es lo que la asamblea rechazo, y por tanto su plan B, cobraba fuerza de nuevo, el resto ya lo conoces, movilización en la estación, se fuerza a buscar un mediador, y se producen las dos últimas reuniones, en la del martes hasta las 23,30 horas no hay firma, y se pide tiempo para una nueva asamblea, pero no se concede saben perfectamente y yo también que vuelve a salir que no, por tanto es si o no al acuerdo (...)"

Y se queda el tío tan campante.
Esa vez no se contentó con meterse en un charco sino que admite que lo hizo a sabiendas de que salpicaría a todo el mundo.
Admite sin tapujos que le importó una higa la voluntad del colectivo al que representa. Aun a sabiendas de que la inmensa mayoría de los socios que le pagan estaría en contra del Acuerdo, él va y lo firma.
Así las cosas, resultan inevitables algunas preguntas:

- ¿Para qué se pidió al colectivo que secundara los paros que él propuso si luego firmó un acuerdo que el propio LuisMi admite como perjudicial para el sector?
- Si días antes dijo en la cadena SER que él, como presidente de la APATZ, no podía firmar un acuerdo como el que rechazó la Asamblea, ¿por qué lo firma una semana después?
- Por qué culpa a tanta gente (Silva de Pablos, PSOE, Dirección General de Consumo, UCA, UGT, Tribunal de la Competencia) de un acuerdo que sólo firmó él.
- Y lo que es más grave, si sabía que una asamblea diría NO al acuerdo, ¿por qué lo firmó?

La incompetencia, cuestiones personales como su propia ambición y los intereses políticos han sido fundamentales en toda esta historia.
A LuisMi lo que le gusta de verdad es salir en los medios de comunicación y codearse con el poder. Ese es su signo de distinción. Y el poder lo sabe. Una foto de El Periódico de Aragón en la que se ve a Belloch, después de la firma, echándole el brazo por el hombro a LusiMi , es bastante ilustrativa de lo que digo.

Personalmente no creo que haya piso de por medio. Puedo equivocarme pero no creo a LuisMi tan corrupto ni que su estupidez llegue tan alto. Lo que hay de por medio son rídiculas ambiciones pseudopolíticas de un personajillo que, de no ser por la desidia de todo un colectivo, nunca hubiera llegado a ser ni el chico de los recados de una Junta mínimamente seria y competente.
De lo único que puede alardear este pobre hombre (y lo que es más triste: alardea) es de haberles jodido un mínimo de 600 millones a 60 familias de colegas suyos.
Si para ello hacía falta perjudicar a todo el sector, pues adelante.
Hay otra pregunta para la que pronto tendremos respuesta:

- Si tan mal lo pasa LuisMi en el cargo, si es objeto de tan duras críticas, si su honor está en entredicho, si echa en cara que durante dos meses sólo ha cobrado 72 euros al día, ¿por qué se olvida de decir que le pagan para beneficiar al gremio y no para joderlo? ¿Por qué aguanta tantas "injusticias"? ¿Por qué no ha dimitido ya si tanto sufre en el cargo?

Las respuestas están en un sillón, varios pisos más arriba de donde tiene su sede la APATZ.
El PAR (ese partido al que, en su momento, negó pertenecer) le ha prometido toda su ayuda para sentarse en él y, para luego, pasearse de su larga mano por el despacho.
¡Como para que me acusen de querer vender la licencia cuanto antes! Con este tío asumiendo responsabilidades no es que uno quiera irse es que a uno lo echan.

Esperemos que en la sala noble de la Cooperativa haya una piscina de esas hinchables porque este pobre hombre se nos puede morir si no tiene a mano un charco en que pisar.

Vídeo-metáfora de la semana:


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