“(…) te parezca bien o mal, y si un juez decide invalidar una asamblea, pues yo personalmente volveré a votar que no y además en la revista próxima se publicara el documento publico con los 33 nombres, ya veremos si entran o no, y mientras tanto a los que de estos 33, se han saltado los horarios, ni una puta llave inglesa.” (LuisMi, dixit, en zarataxi.com).
Nadie por estos lares espera ya la más mínima coherencia entre lo que dice Luis Miguel de Torres Segura y lo que luego hace. Tiene menos credibilidad que un horario de misas en el Pravda de los años 50.
Me pregunto si LuisMi publicará también en la "revista" el nombre de todos los que serán imputados en la querella que en los próximos días interpondré por detención ilegal, coacciones y amenazas. Dado su gran compañerismo, lo mismo se autoinculpa porque, no lo olviden los que se sentarán ante el juez, culpa suya fue el ilegal cambio de calendario laboral que, en gran medida, propició mi "caza y captura".
Dice LuisMi (y miente) que los estatutos de la asociación impiden que los socios dicrepende de lo acordado por la Junta y por eso nos prohíbe la entrada (*).
¿Se prohíbe discrepar o prima el principio democrático? ¿Expulsó en su día a los que recurrieron contra la APATZ la prohibición de contratar asalariados? NO. Y si él, "hipotéticamente", hubiera firmado algo ilegal o en contra de la asamblea, ¿qué dicen los estatutos? ¿qué deben hacer los socios? ¿callar y tragar?
En función de esos supuestos estatutos, LuisMi tendría que autoexpulsarse de la APATZ por incumplir los horarios propuestos por él y aprobados por el Ayuntamiento ¿Se castigará a sí mismo sin prestarse no "una puta llave inglesa" sino un clinex para los mocos?
Yo apuesto a que no. Y en esto LuisMi no me llevará la contraria... aunque, a fuerza de ser incoherente, cabe la gozosa sorpresa.
(*) Esa estúpida justificación utiliza LuisMi para argumentar su negativa a admitir como socios a los nuevos titulares cuando la realidad es que tiene miedo a que se sepan sus verdaderas motivaciones para firmar el acuerdo en contra de la asamblea.
Por desgracia para LuisMI, el miedo sólo paraliza a quien lo padece y no a quien lo provoca.
Yo todavía me muevo.
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