sábado, 13 de diciembre de 2008

Me acuerdo del acuerdo

El 29 de noviembre de 2007 el Ayuntamiento de Zaragoza y Luis Miguel de Torres Segura, presidente de la APATZ acuerdan:

PRIMERO. El Ayuntamiento de Zaragoza y la Asociación Provincial de Auto Taxi de Zaragoza manifiestan su acuerdo en la voluntad de adoptar las medidas oportunas para la mejora del servicio de autotaxi, tanto a favor del interés público como de los intereses profesionales de los taxistas, fijando como objetivos absolutamente prioritarios la garantía de la seguridad de los profesionales del sector y la más adecuada calidad del servicio a los usuarios. Reconociendo ambas partes la necesidad para ello de disponer de datos fiables sobre la organización y funcionamiento efectivos del servicio que permitan conocer la situación real de éste en los diferentes tramos horarios y en las diversas zonas de la ciudad.
A tal efecto
, la APATZ fomentará entre sus socios, y realizará sus mejores gestiones ante las diversas emisoras de Radio Taxi, a fin de que los datos de que éstas dispongan sobre taxis en servicio, libres y ocupados, y su distribución espacial, en los diferentes tramos horarios, sean transmitidos, a través del sistema técnicamente pertinente, al centro o centros de seguimiento que el Ayuntamiento determine.
El Ayuntamiento adoptará las medidas oportunas para garantizar que la información proporcionada por el sistema sea accesible únicamente para el personal autorizado, y exclusivamente a los efectos de obtener datos estadísticos pertinentes para la supervisión del servicio público, tales como número de auto-taxis en servicio por tramos horarios, cumplimiento de los turnos establecidos, atención a las paradas, distribución de los servicios entre diversas áreas del término municipal u otros similares.
En ningún caso la información suministrada por el sistema se utilizará para fines distintos de los especificados.
El Ayuntamiento ofrecerá a las otras emisoras ayuda económica para la implantación de sistemas de gestión de flotas, en términos similares a la aportada a la de la Cooperativa de Autotaxi.

LuisMi, cuando firmó, no sólo lo hizo en contra de la voluntad del colectivo manifestada en Asamblea una semana antes sino que aceptó y asumió como suyos los planes municipales de control del servicio y se comprometió a realizar las gestiones necesarias para conseguir que las distintas emisoras de Radio-taxi facilitaran los datos que, ahora, el Ayuntamiento parece dispuesto a reclamar en exigencia de lo firmado.
Datos sobre número de taxis en servicio por tramos horarios; cumplimiento de los turnos establecidos (lo que implica el acuerdo de LuisMi para que el Ayuntamiento los establezca en el futuro); atención a las paradas (lo que implica que LuisMi está expresamente de acuerdo con el Ayuntamiento para, en su caso, implantar un contingente obligatorio de taxis en las paradas que el consistorio considere oportuno).
En su día dije que LuisMi no sabía lo qua había firmado. Puede que entonces estuviera equivocado y LuisMi fuera consciente de que estaba firmando el peor acuerdo que jamás firmó dirigente alguno del taxi en esta ciudad.
¿Qué lo movió a ello? He sido incapaz de encontrar una respuesta coherente. Tal vez no la haya.
Puede que LusiMi fuera consciente también de las consecuencias que la firma del acuerdo acarrearía en el sector. Puede incluso que en el momento en que estampó su nombre en cada una de las páginas ya hubiera elegido los chivos expiatorios de su culpa: Paco Rubio e Iván Vela.
Dos trabajadores del taxi que tienen recurrido el acuerdo y el Reglamento que desencadenó la firma de LuisMi. Recursos que el presidente de la APATZ debería de haber interpuesto en cumplimiento de los estatutos de la APATZ [art. 26, m)] para la defensa de los intereses del colectivo. En lugar de recurrir, LuisMi y su Junta, van de la mano con el Ayuntamiento en contra de los que sí hemos recurrido.
La coherencia no fue nunca una de las virtudes de LuisMi y su Junta. Lo suyo simpre fueron los charcos. Por desgracia, el que pisaron el 28 de noviembre de 2007 salpica, y salpicará por mucho tiempo, a todo un gremio.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Lo que tiene que hacer el martes es dar explicaciones a todo un colectivo que votó en una asamblea y luego no se cumplió.

Luis Miguel de Torres cobra dinero, para representar al sector y solucionar unos problemas que él tuvo una parte muy importante de culpa. Pero lo peor no es su "patosidad". Lo peor es su empeño en no reconocer los errores.

Si el martes sale cualquier asunto por votación: QUE SE CUMPLA.

No se si pisa charcos o pisa catalinas, pero su dignidad tendría que verse en una dimisión del cargo que no ha sabido llevar.

Ni un tartamudeo más señor Luis Miguel, no se ponga nervioso.

Relájese y se marche de una vez, que bastante complicado tenemos el tema en el taxi actualmente y aunque suya no es la culpa, usted no ha hecho mas que empeorarlo todo.

Ya vale de perjudicar al gremio, con ignorancias y despropósitos.

Usted pensó en su día en cantar bien en la Coral. Pues ha cantado y mucho... pero en otro sitio.

Paco Rubio dijo...

Desde mi punto de vista las explicaciones no irán más allá de culpabilizar a UGT. Creo que conozco a LuisMi. No suele dar la cara ni asumir sus errores. Prefiere la táctica de desviar responsabilidades porque hasta el momento le ha salido bien ya que ha contado con la tradicional desidia y desinformación del gremio. Sin esa falta de compromiso en el sector, Luismi habría sido expulsado con deshonor de la presidencia. Sé que no ha dicho la verdad, sé que se ha callado cosas y tengo el convencimiento de que espera salir con bien de esta poniendo a los pies de los caballos a los responsables de UGT que son los únicos que han recurrido el nefasto acuerdo y el lamentable Reglamento a que dio pie la firma de LuisMi.
La Junta ha hecho de este asunto una cuestión personal. NO HAN ACEPTADO QUE EL CUMPLIMIENTO ESTRICTO DE LA LEGALIDAD QUE HEMOS DEFENDIDO DESDE EL SINDICATO JUGABA A NUESTRO FAVOR.
Al mismo tiempo, y aunque suene petulante, no han sabido calibrar al adversario y se han olvidado de que el tiempo siempre acaba con los parches que pusieron para tapar determinadas carencias y objetivos poco confesables. Dentro de esos objetivos, por increible que parezca, está el de la venganza del mal perdedor. Para ser más concreto, LuisMi y su Junta se sintieron pagados con un acuerdo que contemplaba por primera vez la imposición de una tasa de 60.000 euros por la concesión de nuevas licencias. Que el resto del acuerdo fuera nefasto para el gremio no pareció preocuparles demasiado.
Según todas las opiniones que hemos sondeado entre los mejores administrativistas de Zargoza, los tribunales acabarán con esa tasa, el Ayto deberá devolver los montantes y nos quedaremos con el resto del reglamento.
Puede que LuisMi se arrepienta entonces de no haber dialogado con UGT para una propuesta consensuada tal y como le sugirió el entonces concejal Sarría.
Ese fue el gran error de partida que cometió LuisMi. Ese y sus sueños de grandeza social y política.